A la par con los tratamientos conservadores (drenaje linfático manual, uso de prendas de compresión, ejercicios), las personas con linfedema debemos tener presentes algunos cuidados especiales en nuestros hábitos. Una parte importante de ellos son los que tienen que ver con la alimentación, ya que, como es bien sabido, lo que consumimos tiene un impacto directo sobre nuestro organismo.
Los nutrientes que requiere el ser humano se dividen en micronutrientes y macronutrientes. Los primeros son las vitaminas y minerales, sustancias básicas para el buen funcionamiento del organismo. Por su parte, los macronutrientes son las grasas, proteínas y carbohidratos que proporcionan energía, permiten reparar los órganos, facilitan el crecimiento y regulan el metabolismo.
Gracias a sus estudios en Nutrición Natural y Holística, y a su experiencia como persona con linfedema, la vicepresidenta de AMAL, Sandra Ardila Jiménez ha recopilado los más importantes nutrientes que benefician a las personas que, como ella, padecemos esta enfermedad. La información está disponible en formato de cartilla digital, a la que puedes acceder desde el botón inferior.